martes, 11 de marzo de 2014

5 de Marzo

Todo estaba listo, no faltaba nada para que comience. Cámara en mano, una noticia nos paraliza. Levantamos todo y emprendimos el regreso.
Ante la impotencia de no saber que hacer, como reaccionar, el primer instinto fue marcar en el teléfono - ¿que hacemos?. Fue la pregunta. A los pocos minutos, ya en la ruta, cada vez más impaciente, marco otro número - Se murió.
El instinto me llevo a hacer esos dos llamados, no podía hacer otra cosa, intentaba ver algo desde el celular en medio de la ruta. Un tremendo vacío me recorrió el cuerpo, como una sensación de haber perdido algo, poco tenia que ver con las frases hechas y los comentarios que inundaron las redes sociales.  A miles de kilómetros de distancia sentía propia esa perdida, ¿por que?.
Por que será que los verdaderos procesos de cambio que se han dado a lo largo de la historia en nuestro continente han sido bastardeados y totalmente boicotiados por los grandes grupos de poder.  "Y le duele que el niño / vaya sano a la escuela / porque de esa madera / de justicia y cariño" será por algo tal simple como esto?
Hasta hace unos meses no sentía necesario hacer esta aclaración, hoy tal vez sea necesaria. El defender (desde Argentina) los procesos latinoamericanos que podemos llamar De Cambio no significa justificar a siegas, todo lo contrario. Pero hay cambios innegables que van más lejos que una coyuntura o un discurso inoportuno.

HASTA SIEMPRE COMPAÑERO!!
TU EJEMPLO VIVE EN EL PUEBLO

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